jueves, 26 de julio de 2007

Visita al tocólogo (un caso verídico).

De pequeño creía que un tocólogo era un doctor que te tocaba y te decía cual era tu dolencia. También pensaba que los practicantes eran unos tíos con suerte porque veían el culo de las chicas, hasta que mandaron inyecciones a mi profesor de inglés y pensé que no era tan afortunado como parecía. La vida está llena de decepciones, es lo que llama la sociedad ‘madurar’.

La primera visita de mi mujer al tocólogo tuvo que ir sola debido a que tuve problemas en el trabajo y no pude acompañarla. Cuando le pregunté que tal había ido me comentó indignada que el tío era grosero, sarcástico, desagradable y tenía un aura de pasotismo total, que a sus preguntas le había respondido incluso grosero y estaba muy enfadada y es mejor no verla enfadada... os lo aseguro.

El caso es que salió la vena macho machote en mi, esa que nos sale a algunos cuando vemos que nuestra chica está en apuros y debemos protegerla, esa misma que llevó a los caballeros andantes a su extinción por eso del honor y otras cosas que hoy ya no existen, como ayudar al necesitado, rezar en bolas toda la noche y llevar escudero corriendo tras el caballo. Le pedí que a la próxima buscase una hora en la que pudiese ir yo sin problemas y que si se propasaba lo más mínimo le iba a poner firme.

Llega el gran día y yo con mi uniforme de trabajo (traje y corbata) me presento allí predispuesto a imponer justicia y desfacer entuertos, entro cual rayo y me planto en medio de la sala a buscar el objeto de mi futura ira. En la habitación veo un despacho normal, una enfermera cincuentona de aspecto serio pero trato profesional nos recibe mientras un hombre alto y grueso que ni siquiera nos mira permanece sentado. El hombre nos hace un gesto para que nos sentemos y le presentamos las ecografías, las mira brevemente y se incorpora.

- nfrmra, prpar una scltcn dl vntr

- Si doctor.

Y yo alucino. Si me llegan a dar una palmada en la espalda se me salen los ojos de lo abiertos que los tenía. Y más alucinado me quedo al ver que mi mujer se levanta y va tras ellos.

Al poco pude escuchar los latidos del corazón del bebé y la verdad es que emociona, pero el tocólogo vuelve de la salita dejando a la enfermera y a mi mujer, al sentarse le pregunto si todo está bien y me suelta mientras mira al techo:

- s, td bin pr sperms k vnga la sñr pr dcr lo k sea.

Y yo mirando al techo con él por si está rezando a algún Dios pagano por la salud de mi futura hija o es que hay alguna especie de araña exótica allí. Entonces viene mi mujer muy sonriente y se sienta. Le comenta al doctor que vomita mucho, que le duele el vientre y que si puede mandarle algo.

- se tm nas pstllas d sts k l mndo, pdn sr hst ds al día n cs d ncntrrs my ml.

El hombre se acomoda en su sillón de tal manera que apoya todo su peso sobre el apoya brazos, como si en cualquier momento fuera a dormir la siesta.

- l sguint pso s ralzr na anltca para vr ls nvels y risg dl sndrm d dwn, no s blgtra.

- Da igual, quiero hacerla- dice mi mujer.

Y yo preguntándome que narices quiere hacer... porque no entendía nada. Si en ese momento se levanta el médico gritando ‘¡¡No hija no!!’ no me hubiera asombrado en absoluto. ¿Cómo pudo ofenderse mi mujer por lo que este hombre decía? Es imposible.

Cuando salí por la puerta entrevisté a mi mujer y me he tenido que creer lo que ella dice que dijo, porque no hay mas pruebas.

Hoy tenemos que volver con la ecografía de las 20 semanas. Evidentemente no voy a la defensiva ni dispuesto a discutir, mi reto en esta ocasión es entender algo de lo que dice este hombre. En la bolsa llevo un magnetófono, grabaré la conversación y la pasaré al revés por si lleva algún mensaje satánico oculto... todo sea por el bien de la humanidad.

Por cierto... es niña.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajaja! Al igual el día que fuiste tú se tragó la mitad de las letras con la intención de ser la mitad de grosero, por si las flais...que Sombra es mucho Sombra;-P

Sombra dijo...

Yo sigo sin saber como pudo ofenderse mi mujer... ¡Si no se le entiende! A ver hoy...

__m__ dijo...

la cosa esta en que las mujeres solas somos mas susceptibles, vulnerables, y se por experiecnia propia, que cuando vas sola aun medico son mas burros, mas groseros y mas ...erm......maleducados. si vas acompañada se cuidan muy mucho de lo que hacen o dicen. total, yendo sola es su palabra contra la tuya, si vas acompañada ya hay testigos.....

tu mujer no te dijo nada despues de esa visita contigo?

enhorawena por esa sombrA y no sombrO. habeis pensado nombres ya?

Sombra dijo...

No sé si se cuidó de decir algo malo ¿Eh? En serio que no se le entiende nada de nada, no es coña.

Mi mujer me dice que es bastante pasota en general pero la gente dice que es el mejor, así que lo que me interesa es la profesionalidad mas que nada. Atendió a mi cuñada en los dos partos y el tío responde bien, pues en el segundo tuvo complicaciones y no tardó un segundo en solucionarlas.

En cuanto a tu pregunta... si ya tenemos el nombre cogido.

:p

__m__ dijo...

si y cual sera cual ser cual sera????


bueno, siempre es mejor un doctor house que un mal educado sin mas....

Sombra dijo...

Supngo que si.

Hoy ha sido hasta simpático y ¡le he entendido! jejeje.

En cuanto al nombre... pues aquí no lo pongo que me salen detractores. Si te veo por el msn te lo digo jejeje

__m__ dijo...

ok, conectada me hallo para verte. ^^

Sombra dijo...

o_0! pero bueno, que a esa hora no estoy aún en casa y no he mirado el blog hasta ahora, estaba limpiando el polvo.

Ya ves lo que tengo que sufrir, una sombra adulta como yo esclavo de las labores del hogar ¿Así quien va a respetarme?

__m__ dijo...

bueno, te respetas a ti mismo, tu esposa te respeta.....y ademas te adora porque le echas un cable con esas labores...eres una sombra adulta, tu lo has dicho, y como tal, tienes tus responsabilidades....no todo va a ser jugar a perseguir a la gente!! jajajajaja

muakis!

Sombra dijo...

El caso es que eso de perseguir a la gente me mola ¿Eh?

Anónimo dijo...

Primerizos, ya he vuelto. No os preocupeis, lo de los tocólogos groseros debe de ser normal, porque el mío, que aparte es mi ginecólogo le pasaba lo mismo, pero de un tiempo a esta parte es una persona correctísima, incluso agradable. A mi doctora de cabecera (ambos del seguro) lo mismo. El problema es que están un poco hartos de chusma o gente maleducada y tratan a todos por igual. En el momento en que te portas de forma diferente al resto.... ya son tuyos.
Un kiss

Sombra dijo...

Jejeje, Asun, yo de momento con entenderle me conformo. Este hombre el problema que le veo es que no tiene en cuenta los miedos que unos padres primerizos puedan tener, y que tienen mil preguntas, eso cabreó a mi mujer, ver que no solo no respondía a sus dudas si no que encima se cachondeaba de ella (o eso dice, porque yo lo que te digo, no le entendí nada de nada). En fin, menos mal que el médico de cabecera es especialista en esta etapa de la vida y nos ayuda mucho.